La influencia más grande_2 Timoteo 1,1

La influencia más grande

2Ti 1:1 Pablo, apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, según la promesa de la vida que es en Cristo Jesús, a Timoteo, amado hijo: Gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y de Jesucristo nuestro Señor. Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día; deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de gozo; trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.
Hace algunos años alguien entrevistó al artista contemporáneo Marc Chagall en un programa de PBS. El joven entrevistador comenzó con una pregunta acerca de las influencias. Su pregunta era muy larga e involucraba y exhibía su propio aprendizaje dándole a todos, incluyendo a Chagall, una lección en cuanto a la naturaleza de las influencias en el artista.
Cuando finalmente el joven le dio oportunidad a Chagall de responder, Chagall dijo de la forma más simple que su mayor influencia había sido su madre. Le tomó un poco de tiempo al joven reponerse de ello.
No conozco mayor huella en una
vida que las de las madres. Creo que por eso el día de las Madres estoy un poco nostálgico. No sólo porque mi madre se ha ido (y quizá el cielo esté más limpio por ello) sino porque es un día en que las verdaderas heroínas de nuestro mundo obtienen el reconocimiento que se merecen. Me quito el sombrero ante cada una de ustedes.
Más que cualquier estadista o maestro, más que cualquier ministro o médico, más que cualquier estrella de cine, atleta, empresario, autor, científico, líder, animador o héroe militar, ustedes son las personas más influyentes en la vida de sus hijos.

¡Nunca duden de ello!

No habría habido un Isaac sin una Sarah, un Moisés sin una Jocabed, un Samuel sin una Ana, un Juan sin una Elizabeth, un Timoteo sin una Eunice o un Juan Marcos sin una María. La influencia de una madre es tan grande que la mostramos aun cuando no nos damos cuenta, muchas veces ante la sorpresa de muchos.

Al pensar en la influencia de mi propia madre sobre mí, dos palabras vienen a mi mente: clase y entusiasmo. Mi madre era una dama de clase y estaba determinada a mantener a nuestra familia fuera de ser ignorantes en las artes o que nos faltara gracia social. Tengo que agradecerle mi amor a la belleza artística, música fina, qué tenedor usar y no mancharme de salsa en la corbata. También poseyó tal entusiasmo por la vida. Estoy en deuda con ella por mi entusiasmo y mi empuje implacable. Su espíritu fue heredado gracias a Dios.

Y así, madres, nunca olviden la permanencia de su impresión. Los niños pueden parecer ingratos, pueden actuar irresponsablemente, pueden aún ignorar tus recordatorios y olvidar tus consejos estos días. Pero creo esto: ellos no pueden borrar tu influencia.

Piensa en cómo tu propia madre ha influido en tu vida. ¿Alguna vez le agradeciste? ¿Le has agradecido a Dios por la influencia de tu madre en tu vida?

No conozco mayor huella permanente en la vida que la hecha por las madres.

Por Charles Swindoll

Comentarios

  1. Dios te bendiga amada.. soy Vanessa Martínez de: Meditando una palabra y comunidad: El Jardín de la Fe en Google plus.

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  2. Pase a visitarte y saludarte.. Dios te bendiga en este día y siempre..

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